México del 68. Cronología de la revuelta estudiantil
14 de septiembre de 2008.
“El movimiento estudiantil de 1968 no nació en ese mismo año; no surgió así nomás por generación espontánea. Sus demandas habían sido planteadas anteriormente por innumerables organizaciones políticas revolucionarias y por importantes grupos estudiantiles. La libertad a los presos políticos es en México una demanda tan vieja como el fenómeno mismo. También la lucha por derogar el artículo 145 que se refiere a la disolución social y porque desaparezca el cuerpo de granaderos. El movimiento de 1968 recogió todas estas demandas y no solo se pronunció por la solución de su pliego petitorio sino que se hizo el vocero de las demandas más sentidas por los estudiantes, los trabajadores y los intelectuales de México.”
“Antes en muchas partes del país, los estudiantes habían encabezado a todo el pueblo en luchas cuyo contenido general tiene mucha relación con el movimiento de 1968. Los más importantes movimientos de este tipo son los de Puebla en 1964, Morelia en 1966, Sonora y Tabasco en 1967… Junto a lo anterior las manifestaciones de solidaridad con Cuba, Vietman y la República Dominicana, movilizaron a grandes grupos de estudiantes principalmente de la ciudad de México, y la conciencia de la opresión de otros pueblos elevó el nivel de su politización y los hizo concientes de su propia fuerza. Ejemplos de esto son la lucha estudiantil en Morelia, durante los años 1962 y 1963; el movimiento por la reforma universitaria en Puebla en 1962; la huelga de la UNAM en 1966; las constantes huelgas estudiantiles por reivindicaciones económicas y académicas realizadas en diversas partes del país (dentro de las que destacan las Normales Rurales); el movimiento de los estudiantes de Escuela de Agronomía de Ciudad Juárez, Chihuahua, que fue apoyado por el resto de las escuelas de agronomía y por los estudiantes del IPN, y muchas otras luchas estudiantiles.”
“Yo no creo que estas luchas estén aisladas las unas de las otras. Por el contrario, creo que podemos decir que a partir de la huelga nacional de abril de 1956, se abrió en México un proceso de ascenso de las luchas estudiantiles. El movimiento Magisterial de 1958, el Ferrocarrilero de 1958-1959 y las manifestaciones de solidaridad con Cuba, fueron hechos que impulsaron dicho proceso, que tiene un punto culminante precisamente en 1968. Probablemente el movimiento Estudiantil espera ahora el “relevo” del movimiento obrero y de las luchas campesinas.” (1)
“El Movimiento estudiantil del 68 fue un movimiento de carácter democrático-popular que pretendía el cumplimiento de la Constitución y, en consecuencia, el respeto a las garantías individuales y colectivas; el derecho de libre asociación y de expresión del pensamiento; el derecho de manifestación y protesta; la derogación de algunos artículos del Código Penal, que desvirtúan y atentan contra el propio espíritu de la Constitución, así como la libertad de los presos políticos. Ramón Ramírez, Sociólogo. (2)
22 de Julio (de 1968)
“Desde principios del ciclo escolar se dieron enfrentamientos entre estudiantes de las Vocacionales 2 y 5 y los de la Preparatoria particular ‘Isaac Ochoterena’. Ese día se dio un ataque de las Vocas 2 y 5, dirigidas por las pandillas ‘los arañas’ y ‘los ciudadelos’ contra la Ochotorena; al no recibir respuesta de éstos, los de la Voca se regresaron a sus planteles. Es entonces cuando fueron atacados por grupos de granaderos, éstos portando macanas y gases lacrimógenos. Después de varias corretizas, una sección de granaderos llegó hasta la Voca 5 penetrando al plantel y golpeando brutalmente a alumnos y profesores que no habían participado en la trifulca. La batalla duró desde las 10:00 a las 13:00 horas en que se retiraron los granderos.” (3)
“Muchos intelectuales, investigadores, historiadores y varios periodistas honestos ya lo habían advertido: el régimen se mantenía en todo el país cada vez más mediante prácticas corruptas de líderes venales pertenecientes al PRI, mediante el uso de prebendas que hacía llegar a los líderes incondicionales, a los periodistas corruptos, a los funcionarios deshonestos y, en suma, a todas las personas con algún peso específico dentro de la sociedad mexicana dispuestas a venderse. El hecho es que todo ese gigantesco sistema corrupto y corruptor, algún día tenía que fallar. Fue un sector particularmente sensible, por su condición social de receptor y generador de conocimientos, el que por primera vez decide cuestionar a todo ese sistema y actuar en consecuencia, revelándose en una vasta, intensa y enérgica lucha contra el aparato gubernamental y por las libertades democráticas, tal como decía el lema que legítimamente adoptamos los estudiantes, decidiendo ejercer día a día esas libertades” (4)
25 de Julio (1968)
“Virtualmente, todas las escuelas públicas como la Universidad Nacional Autónoma de México, la Escuela Nacional de Agricultura de Chapingo, la Escuela Normal Superior, la Escuela Nacional de Maestros, el Instituto Politécnico Nacional, y algunas privadas como la Universidad Iberoamericana, se declaran en huelga; las sociedades de alumnos son rebasadas por los comités de Lucha a nivel local y se conforma el Consejo Nacional de Huelga, integrado por representantes elegidos en cada escuela con la finalidad de orientar y conducir las acciones”
“Los profesores, encabezados por el ing. Heberto Castillo Martínez, Fausto Trejo, Elí de Gortari, se agrupan en la Coalición de Maestros y participan codo con codo al lado de los estudiantes universitarios”
“El país se convierte en escenario de un gran debate político. Los estudiantes y sus aliados: intelectuales como Elena Garro, José Revueltas, cuestionan abiertamente al sistema del PRI-GOBERNO, grandes conglomerados sociales no dudan en alinearse a lado del movimiento estudiantil. Los representantes del gobierno, no están preparados para la discusión, sólo descalifican, tildan a los jóvenes de instrumentos del comunismo internacional. Nunca el discurso originado desde el poder fue tan pobre, tan torpe, tan alejado de la realidad mexicana” (5)
24 de julio de 1968
El diario Excelsior publicó en su primera plana: Se ha declarado la huelga por el comité ejecutivo de la Sociedad de alumnos de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM; los granaderos invaden la Vocacional 5, después de que, junto con alumnos de la Vocacional 2, provocados por las pandillas de los “araños” y “cuidadelos”, lapidaron el edificio de la preparatoria particular “Issac Ochoterena”, incorporada a la UNAM. (5)
26 de julio
Se realizó la marcha convocada por la FNET con la participación de alrededor de 50 mil estudiantes. A unas cuantas cuadras se llevaba a cabo otra manifestación para conmemorar el aniversario de la toma del Cuartel Moncada con el que se inició la Revolución cubana. Esta actividad fue convocada por la CNDE, organización estudiantil dirigida por el PCM. Ambas manifestaciones tenían el permiso del DDF. [en esa época se requería tramitar permiso ante las autoridades para realizar marchas, no existía la libre manifestación]
La indignación de los estudiantes del Politécnico que participaron en la marcha de la FNTE era tal, que alrededor de 5 mil se separaron al grito de ¡Zócalo… Zócalo! Con el propósito de dirigirse a ese lugar [nunca antes ninguna marcha había llegado al zócalo]. Se reunieron con la marcha en apoyo a Cuba que en ese momento se encontraba en el Hemiciclo a Benito Juárez y unidos se dirigieron por las calles de Madero hacia el Zócalo.
Al darse cuenta del gran despliegue policíaco en las calles vecinas varios estudiantes trataron de evitar que la marcha siguiera, pero la indignación estudiantil era muy grande. El choque fue inminente y el enfrentamiento entre policías y estudiantes duró varias horas, la policía realizó una represión despiadada, los estudiantes fueron perseguidos y golpeados sin piedad, convirtiéndose el centro de la ciudad en un verdadero campo de batalla.
El balance de los del Politécnico fue que hubo 8 muertos, 500 heridos y 200 detenidos. La policía declaró haber detenido a 76 personas y el Regente Alfonso Corona del Rosal negó que hubiera muertos.
Al mismo tiempo que se desarrollaban los acontecimientos, agentes del Dirección Federal de Seguridad del Servicio Secreto ocupaban las oficinas del Comité Central del PCM y los talleres de su órgano periodístico ‘La Voz de México’; ahí mismo aprendieron a algunos miembros del Partido, a otros en sus domicilios y otros más en lugares alejados de los acontecimientos. Pretendían hacerle creer a la opinión pública que fueron ellos los que provocaron el enfrentamiento. (3)
27 de julio
En la UNAM los estudiantes ocuparon las escuelas Preparatorias 1,2 y 3, esto como respuesta por el asesinato, represión y encarcelamiento de sus compañeros. Al mismo tiempo en el Poli, los estudiantes de Economía desconocieron a la FNET por su actitud reaccionaria al declararse en contra del movimiento y justificando la represión hacia este, y posteriormente se organizaron en Comités de Lucha. Además convocaron a una huelga general universitaria y pidieron la desaparición del cuerpo de granaderos. (3)
28 de julio
El comité coordinador del Movimiento General de Huelga del IPN, formado a raíz de los acontecimientos, desconoció a la FNET que fue acusada de innumerables actos de traición al estudiantado y de haber sido controlada y recibir subsidios por parte del gobierno. Cabe aclarar que la FNET empezó a debilitarse desde 1967, cuando trató de impedir que los estudiantes del IPN se fueran a la huelga en apoyo a un movimiento en Chapingo. Otro factor que contribuyó a su debilitamiento fue que la Dirección de Policía del DF declaró que fue a petición de la propia FNET que los granaderos reprimieron a los manifestantes del 26 de julio. Ese mismo día se llevó a cabo una importante reunión en la Escuela Superior de Economía del IPN con la asistencia de representantes del IPN, UNAM, Normal Superior y Chapingo (nombrados por asambleas). Se elaboró un pliego petitorio y se estudió la posibilidad de la huelga general hasta conseguir su cumplimiento. Estas fueron las demandas:
1.- Destitución de la FNET, el MURO y la Porra Universitaria.
2.- Expulsión de los estudiantes miembros de las citadas agrupaciones y del PRI.
3.- Indemnización por parte del gobierno a los estudiantes heridos y a los familiares de los muertos.
4.- Excarcelación de todos los estudiantes detenidos.
5.- Desaparición del cuerpo de granaderos y demás grupos de represión.
6.- Derogación del Artículo 145 del código Penal. (3)
29 de julio
La policía tratando de responsabilizar a los estudiantes franceses de los hechos, persiguió a varios de ellos que estaban ligados a la “Revolución de Mayo” (el gran movimiento estudiantil y popular de mayo del 68’ en Francia). Por la tarde fue disuelto un mitin que pretendieron hacer los estudiantes en el Zócalo, Inmediatamente se iniciaron choques violentos entre estudiantes y granaderos, la contienda se mantuvo durante el resto del día y las primeras horas de la noche hasta que los estudiantes se replegaron en las Preparatorias 1 y 3.
30 de julio
El centro de la ciudad volvió a ser un campo de batalla, pues el estudiantado en su repliegue colocó muchas barricadas con camiones y llantas que fueron quemadas. Los granaderos, al tratar de detener a los estudiantes, fueron repelidos por la resistencia que estos presentaron. La capacidad de combate de los estudiantes fue tal que el gobierno ordenó la intervención del ejército. Los militares se abrieron camino destruyendo de un bazucazo la puerta principal de la Prepa 1, además tomaron las Prepas 3, 2 y 5 de la UNAM y Voca 6 del IPN. Se habla de que hubo muertos en el bazucazo y las acciones represivas del ejército, el numero de lesionados fue de 400 y el de detenidos de 1000. Al medio día en CU, el rector Javier Barros Sierra decretó día de luto para la UNAM por la violación de la autonomía universitaria, alzando la bandera a media asta. Los Consejeros de las Facultades y todo el profesorado del IPN y Chapingo, así como los del Colegio de México, manifestaron su apoyo a las autoridades universitarias y a la lucha de los estudiantes. En esos momentos esos el Regente Corona del Rosal declaró que los acontecimientos se debieron a los “agitadores profesionales” del PCM y el Secretario de Gobernación Luís Echeverría afirmó que “todo fue producto de un plan de la CNED”. (3)
31 de julio
Se celebró un mitin en CU convocado por las autoridades universitarias. El rector anunció su disposición a encabezar una manifestación en la que dijo, presentaría la demanda de respeto absoluto a la autonomía universitaria. (3)
1º de agosto
El rector encabezó la manifestación de duelo con un contingente de 100 mil estudiantes y directores de facultades y escuelas. Al mismo tiempo en Guadalajara Gustavo Díaz Ordaz (GDO) hizo declaraciones aparentemente conciliatorias: “He aquí mi mano tendida”. Esto cuando la represión al movimiento no había dejado de darse mediante secuestros, detenciones y cateos sin orden legal. (3)
2 de agosto
En algunas asambleas estudiantiles, especialmente en las escuelas más politizadas de la UNAM, se desató una reacción contra la manifestación de la víspera, calificándola como una farsa oficialista. En Ciencias Políticas se habló de que fue una abierta traición y que se intentó mediatizar al movimiento a través de la consigna abstracta de autonomía universitaria, además de que constituyó un gran golpe al movimiento y fue el éxito de las manobras de Barros Sierra que ya en ese entonces resultaban mediatizadotas. (3)
3 de agosto
La FNET se identificó ampliamente con el gobierno y a la vez quedó aislada al declarar: “el gobierno de México es víctima de una conspiración nacional e internacional”. (3)
4 de agosto
Hicieron su aparición en forma vigorosa y en gran parte de la ciudad las brigadas estudiantiles, como una forma de lucha paralela a las manifestaciones y mítines, cumpliendo con el doble objetivo de informar de la causa estudiantil y contrarrestar la campaña de falsedades y mentiras de la prensa.
En aquel día los estudiantes dieron a conocer el pliego petitorio definitivo de los 6 puntos:
I. Libertad de los presos políticos.
II. Destitución de los generales Luís Cueto y Raúl Mendiolea, así como del teniente coronel Armando Frías.
III. Extinción del cuerpo de granaderos.
IV. Derogación del Art. 145 y 145 bis del Código penal.
V. Indemnización de los familiares de los muertos por la represión.
VI. Deslindamiento de responsabilidades por parte de las autoridades a través de la policía, granaderos y ejército. (3)
5 de agosto
Se llevó a cabo una de las primeras grandes manifestaciones del Movimiento, convocada por el Comité Coordinador de Huelga del IPN; la marcha reunió alrededor de mil estudiantes. Es estos momentos las consignas contra la represión no se referían a la defensa de la autonomía universitaria, sino que hacían un llamado a que se uniera el pueblo al Movimiento (únete pueblo…) y se lanzaron consignas contra la represión y el gobierno. En una asamblea anterior a la marcha, se formó el Comité de Profesores del IPN Pro Libertades Democráticas. Se le pidió al director del Politécnico, Massieu, que encabezara la marcha pero se negó.
Es muy importante recordar que del 4 de agosto en adelante no dejarían de actuar las brigadas estudiantiles de información y vinculación, las asambleas estudiantiles posteriormente las asambleas generales, que fueron el motor de las decisiones y acciones durante el movimiento, así como los Comités de Lucha. Las brigadas estudiantiles realizaban el boteo, el reparto de volantes y los mítines relámpago, estos últimos con el fin de evitar la represión policíaca y de agitar y agrupar a la población. Durante los mítines relámpago habían numerosos casos en que los que ahí congregados defendían al orador cuando atacaban los granaderos.
La gran simpatía que el Movimiento había logrado también se demostraba con el actuar de los sectores populares, por ejemplo, en los mítines relámpago que realizaban en mercados les regalaban todo tipo de mercaderías; en las marchas se unían espontáneamente vendedores ambulantes, boleros y niños periodiqueros, además de algunos trabajadores organizados. Al paso de las marchas se oían atronadores aplausos y gritos de apoyo a los estudiantes formándose enormes vallas a las orillas de las manifestaciones. (3)
8 de agosto
El Comité Coordinador de Huelga del IPN declaró que cualquier plática tendiente a solucionar el pliego petitorio debería ser pública y utilizando los medios masivos de comunicación.
Tratando de darle fin al Movimiento las autoridades gubernamentales como Corona del Rosal, se dirigieron al director del IPN, Massieu, sugiriéndole se formara una Comisión integrada por representantes del gobierno, profesores y estudiantes con otros sectores de la ‘opinión pública’ para buscar una solución pacífica al conflicto y así desconocer a los órganos dirigentes surgidos en la lucha. (3)
9 de agosto
Se formó el Consejo Nacional de Huelga (CNH) en una enorme Asamblea Estudiantil en la que participaron 38 Comités de Lucha de las Asambleas de la UNAM, IPN, Chapingo, Normal Superior, así como el apoyo que para estos momentos brindaron los estudiantes de Bellas Artes, la Universidad Iberoamericana, la Escuela Nacional de Antropología e Historia y algunos de secundaria. (3)
10 de agosto
El CNH declaró: “cualquier solución que se intente (para el pliego petitorio) deberá ser aprobada por el CNH y desconocemos y desaprobamos cualquier arreglo el margen de este Consejo…”. Respecto al diálogo público: “para iniciar el diálogo público es preciso que se contemple la necesidad de abrir perspectivas de libertad sindical, gestionar la instauración de la semana laboral de 40 horas, establecer el control de precios y salarios a través de Comités de Lucha Populares y supervisar el reparto agrario mediante Comités de Luchas Campesinos”. (3)
La Huelga Nacional
“…En el Politécnico teníamos una significativa experiencia: en el año anterior, en 1967, habíamos desarrollado, con buenos resultados, un movimiento de huelga solidaria con los estudiantes de Agricultura de ciudad Juárez, y para el caso habíamos construido un organismo dirigente que se llamó Comité General de Huelga, en 68 repetimos el esquema desde el primer momento… Los primeros días de Agosto publicamos un desplegado firmado como ‘Comisión Organizadora de la Manifestación’, haciendo público el pliego petitorio de los 6 puntos, estableciendo las bases de lo que posteriormente fue el Consejo Nacional de Huelga.”
“…También decidimos lanzar un desafío de mucho riesgo… emplazaríamos al gobierno a dar una respuesta satisfactoria a todas nuestras demandas en un plazo perentorio de 72 horas, o en caso contrario los estudiantes haríamos estallar una huelga nacional indefinida… En esos tres días las escuelas designaron sus representantes ante el CNH y se estabilizó de manera completa una huelga nacional que incluyó a todas las instituciones de enseñanza superior del centro del país y numerosas universidades de provincia”. Raúl Alvarez Garín, del CNH.
13 de agosto
Se realizó la primera gran marcha convocada por el Movimiento estudiantil organizado en el CNH, que culminó en el Zócalo. Entre 250 a 300 mil personas desfilaron en completo orden y las fuerzas represivas no agredieron. Los contingentes llevaban carteles y mantas con consignas como: “Los profesores reprobamos al gobierno por su política de terror”; “Libros si, bayonetas no”; “al hambre no se le doma, se le educa”. Entre las consignas coreadas estaban: ¡Liberad presos políticos! ¡Che, Che, Che Guevara! ¡Unete pueblo…! ¡México libertad! ¡Diálogo, diálogo!… ¡Sal al balcón hocicón! El Colegio de México se unió al Movimiento exigiendo la solución al pliego petitorio. (3)
15 de agosto
El Consejo Universitario de la UNAM apoyó los 6 pontos del pliego petitorio y expresó la exigencia de libertad a los presos políticos. La Universidad iberoamericana y el Colegio de México decretaron un paro indefinido en apoyo a sus compañeros e inmediatamente reiteraron la demanda de solución al pliego petitorio. Se constituyó la Asamblea de Escritores y Artistas que también exigían la solución a las demandas del movimiento Estudiantil. (3)
“No es cierto que los estudiantes estuvieran solos, y que los obreros no les echaran ni un lazo. Hubo trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad que hicieron público s apoyo en un manifiesto el 13 septiembre de 1968, en Excélsior; también el Grupo de Sindicatos Independientes se adhirió, como lo atestigua El Día, el 13 de septiembre. A la grandiosa lucha estudiantil. Encabezaba la lista de firmantes Othón Salazar, por el Movimiento Revolucionario del Magisterio; también 37 sacerdotes mexicanos (ellos se dicen obreros de Cristo) se hicieron solidarios del actual despertar de la juventud, en El Día, el 11 de septiembre de 1968. ¿Y el Sindicato de Trabajadores de la Universidad de Nuevo León? ¿Y los pasantes de los Hospitales General, Juárez, de la Mujer, Maternidad Isidro Espinosa de los Reyes de la SSA y del Hospital de la SCOP? ¿Y los médicos de tantos hospitales? ¿Y el Sindicato Revolucionario de Trabajadores de la Fábrica de Loza ‘El Anfora’ que apoyó los seis puntos estudiantiles, asesorado por el Lic. –Armando Castillejos, ahora encarcelado? ¿Y la Comisión Organizadora de Telefonistas?… Todos ellos patentizaron en una u otra forma su apoyo al movimiento, y, aunque no se logró llegar a la gran masa obrera, estas adhesiones constituyen cierta forma un triunfo de los estudiantes en 1968″. Ernesto Olvera, profesor de Prepa 1.
20 de agosto
La Coalición de Profesores invitó a los diputados y Senadores del D.F. a mantener un debate en C.U. estos declinaron públicamente pero se desarrolló un mitin con cerca de 20 mil personas. El gobierno intentó parar el Movimiento primero por medio de la FNET y después a través del director del IPN que se mostró intransigente e intentó desvirtuar el Movimiento. (3)
21 de agosto
El CNH declara que es partidario del diálogo, pero bajo la condición de que la discusión entre estudiantes y autoridades sea pública.
Se transmite por televisión un debate sobre las causas del movimiento estudiantil, con la participación de Iñigo Laviada, Ifigenia M. de Navarrete, Heberto Castillo, Víctor Flores Olea y Francisco López Cámara. Todos ellos coinciden en que el conflicto debe resolverse mediante el diálogo entre estudiantes y autoridades. (6)
22 de agosto
Luís Echeverría, Secretario de Gobernación declaró estar “en la mejor disposición de recibir a los representantes de maestros y estudiantes… a fin de resolver el conflicto”. En este momento el diálogo implicaba una gran disyuntiva: o bien se aceptaba de inmediato e diálogo, y con esto se paralizaba la acción y vinculación con los obreros y sectores populares, o se rechazaba, y con esto se colocaba en una situación muy difícil a los sectores más consecuentes, quienes aparecerían como los intransigentes. (3)
23 de agosto
Se comunicó la aceptación de GDO del diálogo público, designando para ello a Luís Echeverría (Srio. de Gobernación), Agustín Yañes (Srio. de Educación), Alfonso Corona del Rosal (Regente del D.F.), Julio Sánchez Vargas (Procurador de la República) y Gilberto Suárez (Procurador del Distrito Federal y Territorios Federales). Al mismo tiempo el CNH declaró (después de una Asamblea plenaria) que: “independientemente de la solución del conflicto, se llevaría a cabo el miércoles 27 de agosto una manifestación que culminaría con un mitin en el Zócalo…” Esta determinación se hizo pública a pesar de fuertes presiones de un sector minoritario del movimiento (presentado fundamentalmente por los funcionarios de los centros educativos) el cual sostenía que era necesario dialogar y parar las movilizaciones. (3)
24 de agosto
En respuesta al comunicado del gobierno la Coalición de profesores declaró: “el CNH es el único que decide de los representantes del movimiento al diálogo público”. El CNH en desplegado, ratificó que es el único organismo representante de la base estudiantil y el único que sostendrá pláticas con el gobierno. Este mismo día el Sindicato Mexicano de Electricistas declaró: “que se opone y se opondrá a toda restricción del ejercicio pleno de la democracia. Es urgente la necesidad de que las autoridades y estudiantes, sin intransigencia, inicien pláticas”. Esto era un reflejo de la expectativa que había de extender el movimiento a otros sectores de la población. (3)
26 de agosto
El CNH anunció que concluido el mitin en el Zócalo se mantendrían guardias en ese lugar, de maestros y estudiantes hasta que se resolviera el conflicto. (3)
27 de agosto
Entre 500 mil y 600 mil personas asistieron a la manifestación de ese día en la que además de estudiantes, participaron contingentes de obreros como los electricistas y petroleros con cientos de mantas en las que decían: “Muera el charrismo sindical”, “Apoyamos el movimiento estudiantil”, “Libertad a los presos políticos y derogación del artículo 145″; en el mitin se quemaron figuras de los dirigentes charros (especialmente de Fidel Velásquez). También asistieron campesinos con mantas con lemas como: “Los campesinos en lucha con los estudiantes por las libertades democráticas, alto a la represión”, además de sectores populares como fueron los voceadores, locatarios de mercados… las consignas de unidad estudiantil fueron variadas: ¡Poli, UNAM unidos vencerán!; ¡Unete Pueblo, no nos abandones! Y hubo letreros que decían: “Las madres mexicanas apoyamos a nuestros hijos”.
Al llegar al zócalo un contingente estudiantil tomó la Catedral, encendió las luces e hizo sonar las campanas a todo vuelo. Se colocó en el hasta central una bandera de huelga como símbolo del movimiento. En el mitin se leyó un mensaje de apoyo al movimiento de los presos políticos y al terminar se lanzó la consigna de que el diálogo público se realizaría en el Zócalo el día del informe presidencial. (3)
A la una de la madrugada, fuerzas del ejército, de la policía y de los bomberos desalojan el Zócalo (7)
El Climax del Movimiento
“¡Sal al balcón, hocicón… Sal al balcón, hocicón!”. Coro en la Plaza de la Constitución.
“A la mañana siguiente del 27 de agosto… se les avisó a los burócratas que tenían que asistir al acto de desagravio que el gobierno ofrecía al lábaro patrio… Como los muchachos encendieron las luces de Catedral, echaron a vuelo sus campanas cuando la manifestación entraba al Zócalo y se izó una bandera rojinegra en el asta central, la prensa utilizó estos ‘delitos’ para lambisconear al gobierno y se quedó con un palmo de narices cuando fueron inmediatamente desmentidos por la Mitra y el Cencos que declararon que el derecho canónico no consideraba un sacrilegio echar a vuelo las campanas ni encender las luces de Catedral, el sacerdote de guardia Jesús Pérez aclaró que los muchachos le habían pedido permiso para subir a tocarlas y que se los había dado; en cuanto a la bandera, se dejó una banderita medio furris, de algodón y al día siguiente amaneció una rojota de satín, nuevecita. ¡Que casualidad! Con todo y todo se organizó el acto de desagravio. Si la obligada asistencia a las ceremonias oficiales –bajo el pena de perder el empleo o por lo menos un día de sueldo- es tolerada con disgusto por los trabajadores al servicio del Estado, esta nueva exigencia les cayó de la patada. No en vano había pasado ya un mes de lucha y manifestaciones, un mes de gritar sin temor lo que se piensa sobre estos ‘democráticos procedimientos’. Los burócratas fueron a la ceremonia de ‘purificación’ cívica, pero no con la actitud deseada por el gobierno sino que, salieron de los ministerios y de las oficinas públicas al grito de: “somos borregos, nos llevan… beee… beee”. Iban balando, fíjate, y gritando desde los camiones: “¡Somos borregos!” Sus balidos se oyeron en todas las calles. “Beee… beee…” Se vaciaron los burócratas. ¡Que ondón más padre! ¡Qué puntada se botaron”… Y eso que se suponía que iban a apoyar el desagravio”. Gilberto Guevara Niebla, del CNH.
“En 1968, la televisión privada se niega a difundir las posiciones del Movimiento. Se prodigan las calumnias y las llamadas al linchamiento moral, los noticieros delatan la insignificancia numérica de las marchas. Las excepciones se localizan con rapidez: el noticiario Excelsior, que cubre adecuadamente las movilizaciones, y un programa especial conducido por Jorge Saldaña, más bien tibio de acuerdo con los estándares de hoy y estrepitoso en 1968, sobre todo por las intervenciones de Heberto Castillo, Ifigenia Martínes y Víctor Flores Olea, que defienden a los estudiantes, que no son delincuentes y están dispuestos al diálogo. No se trata, insisten, de una conspiración contra la autoridad”. El único programa sobre el Movimiento consolida, acto seguido, la censura en televisión”. Carlos Motiváis, escritor.
“El día 29 de nuevo hubo refriegas en el centro, porque el Ejército y la policía actuaban para disolver cualquier manifestación de descontento; el día 30 se vivió una verdadera situación de alarma, porque corrió el rumor de que los petroleros de la refinería de Azcapotzalco habían decidido cortar el suministro de gasolina en apoyo a los estudiantes: las colas de vehículos en las gasolinerías se hicieron gigantescas y se mantuvieron hasta secar los tanques y hasta altas horas de la noche. Lo cierto fue que en la Refinería se había producido un incidente entre un numeroso grupo de jóvenes que incluía a petroleros y brigadas estudiantiles que los apoyaban y que se enfrentaban con elementos del Ejército que pretendían impedirles que se manifestaran con los estandartes del sindicato”. Raúl Alvarez Garín, del CNH.
28 de agosto
Después del mitin se quedaron muchas guardias de estudiantes y maestros y a la una de la madrugada los batallones 43 y 44 de infantería, 12 carros blindados con Guardias Presidenciales, un batallón de tránsito y doscientas patrullas, desalojaron el Zócalo. A raíz de esa intervención hubo varias escisiones en el movimiento y una actitud autocrítica dentro de él. El DDF organizó un mitin de respuesta al que llamó de “desagravio de la bandera nacional”, obligando a los burócratas a asistir como “acarreados”. Grupos estudiantiles lograron intercalarse en el contingente y se organizaron varios mitines al interior. Los burócratas se rebelaron a sus jefes y protestaron por el acarreo, gritándoles insultos a los granaderos terminando el “desagravio” en un zafarrancho. Entonces intervino la policía y el ejército, con un saldo de 32 heridos. Por otro lado el CNH se autocriticó por las propuestas de exigencia de diálogo el primero de septiembre y la guardia permanente pues se consideraron “actitudes intransigentes” que abrieron las puertas a la represión.
29 de agosto
Médicos residentes del Hospital General se declararon en huelga y lo mismo hicieron los trabajadores de la sección 37 del SPM. Los vecinos de la Unidad de Tlatelolco convocaron a un mitin e protesta por el ataque sufrido a la Voca 5 (60 individuos enmascarados dispararon con ametralladoras y rifles de alto poder, en la madrugada). El ejército impidió el mitin. Se reprimió a brigadas estudiantiles pues fueron aprehendidos 23 estudiantes que pretendían hacer un mitin en la refinería de Azcapotzalco. La muchedumbre apedreó al ejército y este disparó causando n herido. En Puebla 5 escuelas de la Universidad del Estado y la Vocacional de Enseñanza Especial decretaron un paro de diez días en apoyo al movimiento estudiantil. El ingeniero y profesor Heberto Castillo, de la Coalición de Maestros, declara, después de haber sido golpeado salvajemente: “La agresión que sufrí es un grave error de quienes la ordenaron… yo no tengo más armas que las ideas… debe respetarse la vigencia de la Constitución.
30 de agosto
El CNH tomó los siguientes acuerdos:
1) No habrían mítines ni manifestaciones estudiantiles en el Zócalo durante el Informe.
2) El Consejo estaba dispuesto a dialogar lo antes posible con la condición de que fuera público y cesara la represión.
3) Las comisiones estudiantiles fueron designadas.
4) El Consejo desarrollaría una ofensiva política entre todos los sectores populares a través de brigadas, las que tendrían instrucciones de no provocar la represión de la policía y ejército.
5) El Movimiento de los estudiantes no tenía relación alguna con la Olimpiada y no intentaría entorpecer su celebración.
A pesar de esta actitud de apertura del CNH un gran número de estudiantes fueron aprehendidos en los centros laborales a donde acudieron a pedir apoyo a los obreros pero a la par de la represión a las brigadas, estas trabajaban con éxito realizándose festivales populares en Zacatenco y CU y propusieron formar Comités de Lucha de barrios.
31 de agosto
Se previó que GDO abordaría el problema estudiantil en su informe, hubo una gran expectación de muchos sectores esperando la respuesta que daría el pliego petitorio. Simultáneamente se dio un atentado contra la Voca 7; setenta sujetos armados hicieron destrozos y golpearon salvajemente a los estudiantes que hacían guardia.
1º de septiembre
El presidente evadió en su informe proponer soluciones a los puntos del pliego petitorio, diciendo que no había presos políticos, defendiendo el artículo 145, etc. Además amenazó “no quisiéramos vernos en el caso de tener que tomar medidas que no deseamos, pero tomaremos si es necesario; hasta donde estemos obligados a llegar, llegaremos… ante la creciente y manifiesta inconformidad de los habitantes de esta gran capital es ineludible deber de la autoridad hacer uso de la fuerza para restablecer el orden jurídico indispensable a toda sociedad organizada”
“Después del Informe presidencial el gobierno recrudece las medidas represivas contra el movimiento estudiantil. Los dirigentes de las centrales obreras y campesinas ligadas al PRI, así como los diputados y senadores priistas se muestran más belicosos hacia el movimiento y propagan con vehemencia su adhesión a la posición presidencial. Los medios de comunicación incrementan la campaña contra el movimiento. Los gobiernos de los estados de la República también adoptan medidas más represivas: en Puebla el ejército toma la Universidad, y en Sinaloa el gobernador Sánchez Celis amenaza con suspender el presupuesto a la Universidad”. Consuelo Sánchez, cronología.
Manifiesto a la Nación
“Nuestro movimiento, por ello, no es una algarada estudiantil más; esto debe comprenderse muy bien por quienes se obstinan en querer ajustar sus nuevas realidades a los viejos sistemas obsoletos de su ‘revolución mexicana’, y de su ‘régimen constitucional’, de su ‘sistema de garantías’ y otros conceptos vacíos, engañosos, de contenido opuesto a lo que expresan”. El Presidente “sólo dejó una disyuntiva a quienes desde el Zócalo, hemos exigido una respuesta a las demandas con concentraciones populares: o aceptamos sus ‘soluciones’ sin seguir presionando; o se reprime, ahora en definitiva, este movimiento popular apelando al ejército, la marina y la aviación (…) Negamos que por nuestra parte existan presiones ilegítimas hacia el Gobierno; pero la falta de respuesta a una demanda lleva necesariamente a la acción popular: única vía que queda abierta ante un régimen sordo y mudo (…) La disyuntiva que se nos plantea entre aceptar sus soluciones o esperar la represión total…Hasta hoy no hemos recibido otra respuesta que el aumento de la represión, las amenazas y las calumnias que pretenden cambiar la opinión pública para volverla desfavorable a nosotros (…) El Gobierno puede solucionar este prolongado conflicto cuando quiera. Nosotros siempre hemos estado dispuestos a hacerlo”. Consejo Nacional de Huelga, respuesta al IV Informe Presidencial.
2 de septiembre
El CNH expresó: “no vamos a dialogar con la presión de los tanques y las bayonetas encima… retiren los tanques de la calle, retiren el ejército de la calle, retiren a todos los provocadores y todas las fuerzas de choque que atacan a nuestras brigadas de la calle y entonces estaremos dispuestos a dialogar y a debatir…”
El máximo organismo charro, la CTM declaró que el Movimiento no era estudiantil, pues no había demandas de ese tipo y agregó: “en el caso de que no se recapacite en la acción subversiva, la CTM participará en el tono, grado y con las consecuencias que sean requeridas, para dar fin al clima antijurídico y de anarquía en que se quiere sumir al país y para desenmascarar a los agitadores”. Con estas declaraciones se dio la luz verde para utilizar a todos los aparatos estatales y destruir el Movimiento, que ya no era únicamente estudiantil, sino que se extendía en un gran número de sectores populares… la vinculación con el pueblo ya era un hecho.
3 de septiembre
El CNH propone que el diálogo:
1) Se base en el pliego petitorio.
2) Se desarrolle exclusivamente entre los representantes del Poder Ejecutivo y los del CNH.
3) Se inicie en la Unidad del Congreso del Centro Médico del IMSS el día lunes 9 de septiembre a las 5 de la tarde. Pablo Gómez de la Escuela Nacional de Economía de la UNAM, La Noche de Tlatelolco.
El Movimiento Estudiantil de México, Ediciones Era. Ramón Ramírez
“Por un 68 Vivo y Combativo”, Colectivo Editorial Vanegas Arroyo.
Roberto Escudero, del CNH. La Estela de Tlatelolco, Ed. Itaca.
Ensayo sobre el 2 de octubre de 1968, Movimiento Nueva Sociedad
Cronología del movimiento estudiantil mexicano de 1968, Consuelo Sánchez.
La Noche de Tlatelolco, Ediciones Era, Elena Poniatowska.
4) Se efectúe ante la presencia del CNH en pleno, la Coalición de Profesores de Enseñanza Media y Superior Pro Libertades Democráticas, la prensa nacional e internacional y los asesores que ambas partes consideren pertinentes.
Sea transmitido por Radio Nacional y Tele Sistema Mexicano. Si esta proposición no es considerada conveniente por el Poder Ejecutivo, el CNH, asienta, está dispuesto a discutir otras propuestas”.
NOTAS:
(1) Pablo Gómez de la Escuela Nacional de Economía de la UNAM, La Noche de Tlatelolco.
(2) El Movimiento Estudiantil de México, Ediciones Era. Ramón Ramírez.
(3) “Por un 68 Vivo y Combativo”, Colectivo Editorial Vanegas Arroyo.
(4) Roberto Escudero, del CNH. La Estela de Tlatelolco, Ed. Itaca.
(5) Ensayo sobre el 2 de octubre de 1968, Movimiento Nueva Sociedad.
(6) Cronología del movimiento estudiantil mexicano de 1968, Consuelo Sánchez.
(7) La Noche de Tlatelolco, Ediciones Era, Elena Poniatowska.
FUENTE: Textos extraídos de Centro Independiente de Noticias:
Cómo fuel el 68 mexicano-i
Cómo fuel el 68 mexicano-ii
Cómo fuel el 68 mexicano-iii