Nuevos desafíos en el proceso de liberación de la mujer cubana

9 de marzo de 2015. Fuente: Texto y fotografías: Luisa Cuevas Raposo

La mujer cubana, de larga trayectoria en la lucha por su liberación (1), tiene ante si nuevos desafíos una vez demostrado que la igualdad de derechos y oportunidades legislada por la Revolución no es suficiente puesto que el sistema patriarcal es mucho más que eso, y persiste.

En estos últimos años muchos son los cambios sociales y económicos que la sociedad cubana está teniendo. Todo esto atañe necesariamente a las mujeres, un 50,15% de las 11.167.325 personas que integran el censo cubano según la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), último censo de 2012. (2)

No obstante, y como suele ocurrir, cuantos más derechos, más información y más conocimiento tenemos, más conscientes somos de nuestra situación en la sociedad y más derechos, más información y más conocimiento queremos.

Situación económica y laboral

De entre la población económicamente activa, las mujeres representan el 47,62 % según datos de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) en 2013, con un índice de ocupación de mujeres del 56,11% frente al 84,15% de los hombres. Esto e un país en el que un 44,9 de los hogares tienen al frente a una mujer.

Por sectores el desequilibrio responde a los oficios, profesiones y trabajos considerados según los roles tradicionales masculino y femenino. Solo en los sectores de las finanzas (58,43%), educación (60,60%) y salud y asistencia social (63,27%) las mujeres superan a los hombres encontrando bastante equilibrio en ciencia y tecnología (48,11%). (3)

Dentro del sector de la salud el 60,2% son médicas, rompiendo con el rol tradicional médico-enfermera. Esto se verá reflejado posteriormente en las misiones internacionalistas cubanas por el mundo.

Aunque en años anteriores había pocas mujeres en cargos de dirección, hoy ocupan responsabilidades como presidentas, vicepresidentas, organizadoras y gestoras económicas, en su mayoría en las Cooperativas de Créditos y Servicios (36,60%), dato aún muy insuficiente.

La mayoría de jueces, fiscales y miembros de la abogacía son mujeres -más del 70% en el sistema de Tribunales y Fiscalía-, lo cual no ocurre en ningún otro país del mundo.

Ha crecido mucho la incorporación al trabajo de las mujeres en el sector cooperativo campesino, en aspectos tan importantes como la producción de alimentos, el control de los recursos, aumento de la disciplina y la organización del trabajo en las áreas en las que laboran, dedicándose de forma muy importante al fomento de cultivos varios, cría de ganado mayor y menor para la producción de leche y carne, etc. según información de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP). Muchas de ellas tienen las tierras en usufructo y en explotación con muy buenos resultados.

Aún así, y como consecuencia de inequidades de género, falta más empleo para las mujeres en las zonas rurales sobre todo porque muchas veces sus trabajos se consideran casi como tareas domésticas que no conllevan remuneración, seguridad social ni derechos laborales, y no aparecen en las estadísticas.

Además hay que tener en cuenta la complejidad de acceso a estos trabajos, puestos y responsabilidades en el ámbito campesino debido al mayor arraigo de las tradiciones patriarcales, resultando insuficiente la labor de esclarecimiento realizadas por las Juntas Directivas de las cooperativas sobre los deberes, derechos y beneficios de las mujeres incorporadas a esa forma productiva. A este respecto es muy importante el trabajo de concienciación realizado, por ejemplo, en la propia ANAP con proyectos de información y concienciación sobre temas de género.

Otros datos nada desechables precisan que las mujeres han encontrado en el sector privado una fuente importante de inserción económica que, además, sigue en crecimiento en la medida que se implementan nuevas formulas para el desarrollo socio-económico del país. No obstante y precisamente por tratarse los sectores de trabajo por cuenta propia y pequeñas empresas, nuevas experiencias en el ámbito laboral, muchas veces las mujeres son víctimas de discriminaciones y violaciones de sus derechos.

El ámbito político y la educación

Es destacable que las mujeres cubanas representan el 33,5% de las personas delegadas de base del Poder Popular, y en las Asambleas Provinciales de esa organización constituyen el 50%.

Cifras conocidas en el 2012 revelan que Cuba es también uno de los tres países del mundo con más alta representatividad femenina parlamentaria (48,86%), mientras que hay dos vicepresidentas del Consejo de Estado, y ocho ocupan diferentes carteras.

Esa inserción en la vida política y socio-económica sería imposible si no existiera un sistema educacional que vela por la superación femenina. Los números indican que hay mayor proporción de graduadas universitarias que graduados. Si se analiza por rama, ellas constituyen el 74,5% de los que concluyeron sus carreras en las ciencias económicas y el 40,7 de las técnicas; el 49,3% de las matemáticas; el 70,6 de las médicas, el 69,8 en las sociales y humanísticas, y el 69,6% de la pedagogía.

Objetivos del milenio

Según informes internacionales de diversos organismos, Cuba avanza de manera importante en el “Objetivo del milenio” nº 3, para promover la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de la mujer.

También se trabaja a fondo desde todos los sectores y en especial desde la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) para llevar a cabo los acuerdos de la IV Conferencia de la Organización de Naciones Unidas sobre la Mujer efectuada en Beijing, China, del 4 al 15 de septiembre de 1995, para lo que el país dispone de un “Plan de Acción de la República de Cuba de seguimiento a la IV Conferencia de la ONU sobre la Mujer”.

Medios de comunicación y publicidad

Hay un gran debate en algunos sectores de la cultura, medios de comunicación y activistas sociales sobre la representación y utilización del cuerpo de la mujer en la publicidad no solo de productos de consumo, como bebidas (4), sino del propio país como destino turístico, en la que se vuelve a utilizar a la mujer joven y mulata como objeto erótico.

El tratamiento del papel de la mujer en los medios de comunicación y sobre todo en películas y series importadas que se emiten por la tv cubana, en las que los roles tradicionales del patrón patriarcal se reproducen, también es objeto análisis.

Por otra parte, han surgido muchas críticas a proyectos disfrazados de culturales o de rescate de tradiciones, que han aflorado en los últimos tiempos, intentando realizar concursos de belleza, aunque no se declaren así oficialmente.

Acoso laboral

Las mujeres casi siempre carecen de poder, están en posiciones más vulnerables e inseguras, en muchas ocasiones nos falta autoconfianza, o fuimos educadas para sufrir en silencio, por eso se dan situaciones de acoso laboral que no son denunciadas, y las más amenazadas son las potenciales competidoras con respecto a las posiciones de mando.

La mujer como cuidadora y principal trabajadora en el hogar

A pesar de múltiples campañas institucionales y de las organizaciones de mujeres para fomentar la corresponsabilidad en las tareas del hogar y el cuidado de hijas e hijos, es mayoritariamente la mujer la que sigue al frente de las mismas.

En una situación de crisis económica, la mujer es la que más padece la falta o las carencias en los servicios de atención a la infancia y a las y los mayores puesto que entre los roles tradicionales aprendidos se sitúa a las mujeres como cuidadoras por excelencia de la familia, no solo recargando la salud femenina, sino incidiendo negativamente en su autocuidado y su proyección social y profesional.

En el contexto cubano actual, el tema del cuidado y autocuidado se convierte en asunto clave, ya que aumenta el número adultos mayores como parte del proceso de envejecimiento poblacional. Esa creciente población envejecida carece al 100% de redes de cuidado, y la mayoría de sus cuidadoras en la familia son mujeres.

Sexualidad y diversidad sexual

En el campo de la sexualidad, se tiende a creer y perpetuar la idea de que la capacidad y deseo sexuales de la mujer son menores que en el varón, a la par que se le asocia a ella, sobre todo, con el amor romántico y la pasividad erótica.

Otra asignatura pendiente es el reconocimiento del “derecho de una mujer a amar a otra mujer”. “Después de haber sufrido la doble y hasta triple discriminación cada vez son más las que se atreven a plantear públicamente estos temas” según asegura la coordinadora de la Red de Mujeres Lesbianas y Bisexuales del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex). Si bien se ha avanzado muchísimo en cuanto a la visibilidad y a la lucha por el derecho a la diversidad sexual, es cierto que hasta en esto los hombres siempre ocupan más el espacio público que las mujeres. Y esto a pesar de que son precisamente las lesbianas las que primero iniciaron, de la mano del CENESEX, la lucha por sus derechos. (5)

Violencia machista

También, tras muchos años de naturalización e invisibilidad, la violencia de género ha ido ganando espacios en el debate social cubano, sobre todo en los espacios académicos y entre profesionales de los medios de comunicación que constantemente debaten sobre la forma de informar y tratar este problema. Especialistas, investigadoras y estudiosas coinciden en la necesidad de una atención integral, que concierte e involucre a todos los actores sociales e instituciones.

"Este asunto demanda acciones articuladas, desde distintas disciplinas, para que las mujeres encuentren respuestas efectivas a su situación", señaló la psiquiatra Ada Alfonso en el panel "Violencia de género en Cuba: desafíos en la atención y prevención".

Nuevos territorios

Un territorio novedoso y aparentemente neutro, el de las redes sociales de internet alberga inequidades de género, según constató una reciente investigación en los perfiles de Facebook de estudiantes de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana.

En su tesis de licenciatura en Comunicación Social, Ariel López Fernández analizó el imaginario de género que mujeres y hombres jóvenes expresan en sus biografías virtuales y concluyó que estas mantienen vigentes supuestos tradicionales y hegemónicos, que van quebrándose, pero con lentitud.

El estudio, presentado en junio de 2014 con el título “Facebook ¿Una red social donde se reproducen desigualdades de género?”, encontró similitudes entre hombres y mujeres al acercarse a las redes sociales, pero también diferencias.

La población universitaria ocupa buena parte de las casi tres millones de computadoras conectadas a internet en Cuba, según datos de la ONEI de 2013, pues este servicio se ofrece en todos los centros de altos estudios del país.

Varias investigaciones señalan además que Facebook es el sitio más visitado desde la isla caribeña, principalmente por menores de 30 años.

Entre los datos obtenidos en la investigación se constata que tanto hombres como mujeres con acceso a esta red social publican mayor cantidad de contenidos tradicionales de la feminidad y masculinidad, entre ellos las referencias a la mujer como objeto de atracción y deseo.

"Los hombres exhiben el cuerpo de las mujeres como ente decorativo, atractivo, de belleza, de placer, como haciéndolas ostensibles a manera de trofeo o triunfo alcanzado", explicó el joven profesional a SEMlac (Servicio de Noticias de la Mujer de América Latina y el Caribe) (6).

A su vez, las mujeres se muestran coquetas, atractivas, hermosas, sensuales, con una belleza pulida, perfilada y exhibiendo su cuerpo, una tendencia que el investigador señala entre las estrategias más fuertes en que se manifiesta la cultura patriarcal.

Declararse heterosexual es frecuente entre el grupo estudiado, tanto en hombres como en mujeres, casi siempre expresando atracción y afinidad hacia personas del sexo opuesto.

Al evaluar las diferencias en los contenidos publicados, la investigación destaca que los hombres otorgan más fuerza al universo profesional en sus mensajes.

Pero …. y además …..

Pero como decía al principio, no todo se reduce a derechos legales y porcentajes, hay aspectos de la realidad de la mujer cubana que, pese a situarse a años luz de los de la mayoría de las mujeres del mundo, aún distan mucho de ser ideales.

Aún queda mucho que avanzar en terrenos como los medios de comunicación o en la falta de respeto a los derechos laborales en las empresas del sector privado.

Las cubanas tienen una ventaja sobre la mayoría de nosotras, y es que la ley y los diferentes poderes, las apoyan en la consecución de sus derechos. Diputados y diputadas de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) dialogan constantemente sobre cómo propiciar una mayor participación femenina en todos los ámbitos de la sociedad, y una cultura basada en la equidad de género.

Teresa Amarelle, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), recuerda que a pesar de los estereotipos machistas que aún existen, Cuba fue el primer país del mundo en firmar la Convención Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, y el segundo en ratificarla.

Teresa dice que las cubanas destacan por su autonomía económica, por el derecho a la toma de decisiones, porque tienen sus propios ingresos y no existe la discriminación salarial, refrendadas así en las leyes de la nación. Pero sabemos que a veces la no discriminación, no se da en que dos personas en la misma categoría y función cobren lo mismo, sino en la igualdad de oportunidades para acceder a determinados puestos.

Y cuando hablamos de igualdad de oportunidades, no solo se debe valorar la cuestión puramente laboral, sino las cargas que las mujeres soportamos fuera del ámbito del trabajo, con la doble jornada, los cuidados, etc..

Por otra parte también habla Teresa de los derechos sexuales y reproductivos, indicando que las mujeres cubanas gozan de los programas de maternidad y paternidad, materno infantil, y del médico de la familia, entre otros, donde la FMC desempeña un papel importante.

Sin embargo piensa que en cuanto al imaginario social falta mucho por hacer, por perfeccionar, y en este sentido, los medios de comunicación deben apoyar esta tarea a través de la confección de materiales no sexistas.

Perspectivas

Aunque es preciso continuar el trabajo lento pero seguro contra el pensamiento machista –en lo cual la Federación de Mujeres Cubanas es un pilar fundamental- la mujer cubana asciende cada vez más a ocupar el lugar que le corresponde en una sociedad que a partir del siglo XIX comenzó a construir, desde la independencia nacional y posteriormente desde el triunfo de la Revolución.

(1) Ver “Cuba, un oasis de derechos para la mujer” y Boletín Cuba Va de Abril/2012
(2) http://www.one.cu/
(3) http://www.one.cu/informenacional2012.htm
(4) http://www.cubainformacion.tv/index.php/genero/60973-el-nuevo-cartel-de-la-bucanero-ies-inutil-la-critica-social-ante-empresarios-economicistas-y-econocratas
(5) http://info.nodo50.org/Conversacion-con-Francisco.html
(6) http://www.redsemlac-cuba.net/

Cuba en segundo lugar del ranking de mujeres parlamentarias

Informaciones sobre la mujer en Cuba. Género y lucha por los derechos a la diversidad sexual


Descargar
Peso: 3.4 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 3.3 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 3.5 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 955 KB
Res: 1397 x 2304 px
Descargar
Peso: 2.6 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 2.3 MB
Res: 2304 x 3072 px
Descargar
Peso: 1.4 MB
Res: 2304 x 3072 px
Descargar
Peso: 3.3 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 1 MB
Res: 1387 x 2296 px
Descargar
Peso: 3.2 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 3.3 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 3.2 MB
Res: 3072 x 2304 px
Descargar
Peso: 3.2 MB
Res: 3072 x 2304 px

Noticias relacionadas

Versión PDF: Descargar artículo en PDF | Enlace permanente: https://info.nodo50.org/5492