El semanario norteamericano Newsweek publicaba el pasado 31 de mayo en su edición internacional un artículo titulado “Cyberwar and Sabotage” (Ciberguerra y Sabotaje) el cual desvelaba el contenido de un plan de la CIA, calificado por la misma como “top-secret”. Según este documento, la agencia de espionaje norteamericana ha sido autorizada por el presidente Clinton “para encontrar otras vías de ataque a Milosevic”.

El plan contempla dos líneas de actuación diferentes que probablemente serían también vigentes en el caso de que finalizase el conflicto armado directo. Ambas líneas tienen una intención última: la “desestabilización” del gobierno serbio presidido por Milosevic.. Por un lado el proyecto considera estratégica la formación de la guerrilla kosovar en distintos actos de sabotaje como son “el corte de líneas telefónicas, voladura de edificios, incendios de reservas de combustible, robo de suministros de comida...”, actos que “socavarían el apoyo popular al líder serbio y dañarían objetivos en Yugoslavia que no pueden ser alcanzados desde el aire”

Una segunda línea iría dirigida a la intervención fraudulenta de las supuestas cuentas bancarias que el presidente Milosevic posee fuera de Yugoslavia. Para ello la CIA utilizará sus propios piratas informáticos (“hackers”) para penetrar en los sistemas informáticos de bancos de todo el mundo en busca de estas cuentas. Para ello deberían sortear, sin la autorización expresa de las entidades bancarias, “cortafuegos” (barreras de acceso a los sistemas) y descifrar claves de acceso cifradas. Todo esto puede sonar al lector a mera “pelicula de espías”, pero Newsweek señala, refiriéndose a este tipo de actividades, que una vez que los “hackers”de la CIA accedieran a las cuentas de Milosevic podrían “robar su efectivo, moverlo a otras cuentas o ir lentamente vaciándolas sacando unos pocos cientos de dólares cada vez”.
Ambas líneas de actuación son un nuevo ejemplo evidente del ejercicio de un terrorismo de estado que supera ampliamente a las propias fronteras de Estados Unidos.

En general los “hackers” son personas expertas en informática y comunicaciones que intentan penetrar en sistemas informáticos con el fin de obtener información de los mismos, sabotearlos o simplemente (en muchas ocasiones es así) se introducen en estos sistemas por la autosatisfación de mostrar agujeros de seguridad en los mismos. de Muchos de ellos, utilizan la red Internet para introducirse en servidores provocando su inutilización o sustituyendo su contenido por otros propios. Conociendo las intenciones de los “otanoaliados”de bloquear la internet yugoslava es de esperar que algunos de estos “hackers” también se dediquen a atacar los servidores servios para bloquear aún más las comunicaciones del país, aunque también es de esperar que otros hackers “defiendan” a estos sistemas de dichos ataques.

En el caso del plan hecho público por Newsweek conviene aclarar que esta revista se refiere claramente a “hackers” o piratas informáticos que son expertos integrantes de la CIA (algo no aclarado en el artículo aparecido en el Ciberpaís del día 3 de junio y en el periódico El País del día 24 de mayo que también se referían a la noticia de Newsweek). En la mayoría de las ocasiones los “hackers” son perseguidos por sus actividades y nada tienen que ver con agencias de espionaje o similares. En concreto, hace unos días, haciendo un alarde de hipocresía importante, en Estados Unidos se han producido redadas policiales con el fin de detener a algunos de ellos (redadas que han sido respondidas por otros “hackers” con el bloqueo de las páginas web del Senado, la Casa Blanca y el FBI).

Estos “juegos de guerra” cibernéticos vienen teniendo lugar desde hace algunos años. La ficción es ya más realidad que ficción. La implementación de los sistemas de seguridad relativos a las comunicaciones (y la inversión en los mismos) está siendo ya uno de los principales quebraderos de cabeza de los más importantes gobiernos del mundo cara al siglo que nos viene.

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